Se reunió por primera vez el Consejo Asesor de la Marca «Producto Tradicional Tandil»
Días pasados tuvo lugar en la Secretaría de Desarrollo local del Municipio el primer encuentro del Consejo Asesor de la Marca «Producto Tradicional Tandil». De la reunión participaron representantes de la Municipalidad, autoridades del Cluster Quesero de Tandil, productores, representantes de la UNICEN, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), y del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), entre otros.
En la oportunidad se expusieron los resultados del trabajo que se viene llevando adelante, con el objetivo de instaurar y poner en práctica acciones para potenciar la marca característica de los quesos de la región. Este producto, junto con el salame, es un símbolo de identidad territorial reconocido en todo el país, y junto con el crecimiento del turismo local, han incrementado su demanda y consumo interno y externo. La distinción con la Marca de origen y calidad “Producto Tradicional Tandil” se encuentra registrada por la Municipalidad de Tandil, a partir de la ordenanza municipal N° 11.638.
El Consejo Asesor tiene como funciones desarrollar y actualizar los protocolos de elaboración de los diferentes productos, propiciar el uso e imposición de la marca en el mercado y revisar antecedentes de las empresas que desean ingresar al uso de la licencia de la misma.
El fruto de un trabajo sostenido
En Tandil existen lazos históricos, materiales e inmateriales, que sustentan el anclaje territorial y cultural de los quesos producidos localmente. La valorización vinculada al origen de los alimentos, como las denominaciones de origen, identificación geográfica, las marcas territoriales, contribuyen a identificar los productos con una cultura o una región particular.
Por eso, desde el Cluster Quesero se viene trabajando junto a otras instituciones en diferentes proyectos que van dando sus frutos. Desde el año 2008 se impulsa una labor de valorización de los quesos de Tandil, a través de símbolos y referencias identitarias como factor de desarrollo rural, teniendo en cuenta inquietudes ecológicas, preocupaciones por la seguridad alimentaria y por la salud.
Además, esta zona es percibida como propicia para la implementación de dispositivos de calificación, no sólo por su historia y tradición quesera sino también por la asociación que se establece en el imaginario de los consumidores entre un saber-hacer anclado en ese territorio desde hace generaciones, las condiciones agroecológicas y climáticas especiales de su paisaje serrano y la calidad que estos dos factores, entre otros, le confieren a sus productos lácteos. Los quesos de Tandil gozan de una reputación y una fama que se extienden por toda la Argentina y, particularmente, en sus destinos turísticos. Sucede entonces que la existencia, dentro del universo de consumidores, de un creciente sector demandante de productos típicos y tradicionales anclados al territorio, refuerza la posibilidad de valorizar atributos distintivos, materiales e inmateriales.
Sin lugar a dudas, la conformación del Cluster Quesero ha sido de vital importancia para algunos productores. El haber cobrado visibilidad ante las instituciones, acceder a financiamiento de insumos para mejorar la calidad, contar con un laboratorio de control de la materia prima y del producto final, agregar valor al suero, mejorar la comercialización de sus productos y, en el caso de la conformación del Consejo, lograr una distinción con un sello de calidad; son factores no menores que permite imaginar un futuro de crecimiento y desarrollo para la actividad.